¿Mantenerse ‘forever young’? Una quimera fuera del alcance de las mortales, por tercas que nos pongamos. Arañar unos años a la edad cronológica sí es posible, gracias al exhaustivo I+D de los laboratorios más avanzados. Estos días he probado firma y tratamiento, todo en la Clínica Moisés Martín Anaya.

Sobre el rostro, unos días menos en mi cantarín recorrido a la vejez.

christina

Línea ‘Wish’ de Christina

La cosa va de emplastar la piel con tres mascarillas, tres. Esto se traduce en un verdadero alud de principios activos, con la conveniente manualidad experta imposible de imitar en casa.

La firma atiende por Christina Cosmetics, y esconde una gran mujer detrás: la israelí Christina Zehavi. Sus formulaciones, de uso en cabina y domiciliario, aglutinan activos de última generación con la tecnología más avanzada –y se pueden comprar en España-. En este caso, voy a recibir factores de crecimiento, factor tímico epidérmico, fibronectina péptido biomimético, aminoácidos de melanoestanina y fitocohesina, además de derivados botánicos e ingredientes esenciales como proteínas, extractos marinos, vitaminas, minerales, oligoelementos, antioxidantes, taninos, ácidos de frutas y extractos de plantas. Quizá haya quien ‘dé más’, pero yo no tengo el placer.

El tratamiento se puede y debe personalizar. Así lo diagnostica Cecilia -20 años de profesión a sus espaldas-, quien modifica el paso de la mascarilla nutritiva “para que mañana no te encuentres la piel grasa”.

Mientras charlamos y me llena la cabezota de buenas ideas para cuidar mi piel, comenzamos con una exfoliación con AHA´s (alfa hidroxiácidos) a base de ácidos glicólico y láctico; peeling enzimático que además de eliminar células muertas, oxigena la piel.

La primera mascarilla contiene leche de almendras y suero de leche de cabra y consigue reafirmar e hidratar. Tras este ungüento, se aplica un suero con tomillo, altramuz, algas, proteínas de trigo y flavonoides, empujón para los mecanismos de defensa.

La segunda mascarilla incluye vitaminas A, C, K y betacaroteno, y tiene acción despigmentante –que nunca viene mal tras el verano-. Es la que me salto por ser demasiado untuosa para mi piel mixta “y asfixiada”.

La tercera es como un refrescante baño de mar a base de alga espirulina, cargada de minerales y oligoelementos con función desintoxicante. La piel queda fresca, muy tersa al tacto, jugosa y con un aspecto más lozano.

Precio: 100 euros.

Moisés Martín Anaya

Moisés Martín Anaya

Clínica Moisés Martín Anaya

Av de Menéndez Pelayo, 9

28009 Madrid

Tel: 914 35 67 76