Es hora de elegir flequillo, los flequillos son el gran convertible del verano. A jugarrrrr….! Cortos cortísimos y muy despuntados, largos hasta las cejas para enmarcar bien la mirada o dulces y redondeados, con raya a un lado o al medio.
¿Quieres saber cómo elegir flequillo? Te damos un repaso de todos los tipos de flequillo que están en el objetivo de unas tijeras bien afiladas y unas manos expertas de un peluquero que las mueva con destreza.
Este verano, los flequillos acariciarán tu frente de la forma que prefieras. En la onda: flequillos juguetones, radicales o sofisticados. Pero tu estilo y personalidad son los que mandan.
Como recurso comodín se suma a las técnicas de corte y peinado para conceder un guiño visual de alto impacto. Un flequillo personalizado a medida es capaz de dar un vuelco a nuestro look y revalorizar nuestras facciones de manera insospechada.
Por ejemplo, una frente pequeña o demasiado grande, siempre sale ganando si se tapa con un gran flequillo. Y unos ojos bonitos, saltarán al primer plano bien enmarcados debajo de un flequillo. También tiene el don de disimular defectos. Como norma, un flequillo ladeado o despuntado equilibra cualquier asimetría de la nariz.
Por otro lado, los flequillos espesos y rectos que nacen desde la coronilla, son ideales para caras ovaladas y alargadas.
CON PELOS Y SEÑALES
• Un flequillo bien diseñado tiene el poder de realzar rasgos y ocultar defectos. Por ejemplo, una nariz grande puede suavizar su perfil si se acompaña de un flequillo corto, despuntado o en “bandeaux”.
• Su objetivo número uno es favorecer la imagen. Sólo se trata de encontrar el tipo de flequillo más adecuado para nuestras facciones y tipo de cara.
• Son el recurso comodín para personalizar cualquier corte a la medida. Admiten infinitas posibilidades gracias a las nuevas técnicas de corte y color.
• Ponen un acento distintivo de estilo y atrevimiento a nuestra imagen como cualquier otro accesorio de moda.
• Lo más importante en el mantenimiento de un flequillo es llevarlo siempre limpio porque al estar en contacto con la frente puede engrasar la piel.
MANTENIMIENTO BÁSICO DEL FLEQUILLO
Es muy sencillo, basta una revisión de puntas una vez al mes para mantenerlo a la longitud adecuada. Básico: un lavado diario o alterno del cabello. La higiene resulta fundamental, sobre todo en los cabellos y pieles con tendencia a la grasa o con acné.
A la hora del peinado, las ceras, espumas y gominas nos ayudan a dar diferentes acabados a un mismo flequillo.
¿Ya tienes más claro cómo elegir flequillo?
¡Feliz flequillamen, queridas!