Nicole Kidman, un ejemplo de exceso de botox y rellenos

Mejorar la flaccidez, ‘subir’ los pómulos que se caen a partir de los 50 o remodelar huecos, hoyuelos y cicatrices que el cáncer nos ha dejado en herencia. La bioplastia, técnica de relleno para rostro y cuerpo con materiales reabsorbibles, llega a niveles profundos -bajo la capa grasa y el músculo- con la intención de rescatar aquellos ‘volúmenes perdidos’ .

Charlamos con el doctor Licitra, director de la clínica Med Estetic y  oncólogo que ha terminado dedicándose a  la medicina estética. Nos cuenta por qué. En los años 80, cuando no existía aún la medicina estética, se dio cuenta de que muchos pacientes que habían padecido cáncer quedaban con la mandíbula amputada, el rostro aplastado y con un gran complejo o problemas psicológicos. Decidió dedicarse entonces a la cirugía estética,  “No me parecía justo que esos pacientes se fueran a casa curados pero desfigurados de por vida”. Nacían los de los primeros materiales de relleno en los años 80 que complementaban, como un puzle, la labor de la cirugía. ‘Por entonces, el doctor brasileño Almir Moojen Nacul inventó la bioplastia o  ‘reposición volumétrica facial’. con esta técnica, y  través de una microcánula que tiene ‘botón anestésico’ se introduce el material en párpados, glúteos, sin cortes ni necesidad de ingreso hospitalario.

El doctor Antonio Licitra

–¿Qué diferencia hay entre los típicos rellenos que a veces dejan cara de muñeca pepona y la bioplastia?

-La bioplastia no pretende tanto estirar la piel para dar volumen -muchas veces exagerado- sino dar un sustento a los tejidos que empiezan a caerse, reposicionarlos. No se trata de inflar un globo.

–¿Cuanto dura?

-Aproximadamente dos años.

-¿Precio orientativo?

-Entre 1.200 y 1.500 euros ‘sustentar’ los pómulos, por ejemplo.

–¿Se utilizan materiales permanentes?

-Yo no porque no me gusta poner nada permanente en un rostro que va a ir cambiando con los años. Lo que es permanente hoy puede condicionar el futuro. Utilizo ácido hialurónico de alta densidad.

 

 

–¿Efectos secundarios?

-Ninguno. Y no se deforman las caras.

–¿Se ha avanzado mucho en la reconstrucción de zonas deterioradas o deformadas por el cáncer?

-Sí, las técnica quirúrgicas han avanzado una barbaridad y también la cirugía plástica. Ahora no se hacen siempre mastectomías totales como antes;  a veces sólo hay que extirpar un cuarto de mama y todo es menos agresivo, las intervenciones son más conservadoras. Lo que promete mucho en el futuro, todavía no ha tenido el empujón que se merece en la regeneración de tejidos del propio afectado, a partir de células madre, en pacientes quemados. Pero el futuro cercano es muy prometedor.

 

Clínica Med Estetic

C/ Pintor Juan Gris, 5. Madrid

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