Vuelve la comida casera, la repostería hecha con cariño y amor, el punto, el jabón casero… A lo mejor esta dichosa crisis tiene un punto positivo y nos sirve para recuperar valores, importantes, que hemos perdido por el camino de la modernidad. Que podamos volver a sentarnos con nuestros mayores para que nos enseñen qué podemos hacer por nosotros mismos, qué tenemos a nuestro alrededor que podría sernos útil.
Coge la libreta y apunta esas recetas que se han ido transmitiendo de generación en generación en tu familia, o esos remedios de la abuela, que son infalibles cuando tenemos cualquier catarro o dolor de estómago –hace dos semanas estuve con un catarro como no recordaba y lo que más me ayudó fueron las infusiones de miel y limón-. Y digo de la abuela porque, salvo excepciones y no nos engañemos, éstos remedios caseros son patrimonio de las mujeres: infusiones, cocimientos y tisanas varias para todos los males. Las mujeres confiamos, más que los hombres, en los usos medicinales de las plantas –el 27% frente al 14%-. Y no lo digo yo, son datos presentados en el VIII Congreso Internacional de Fitoterapia Ciudad de Oviedo.
Según explica Ignacio Bachiller, coordinador del congreso “Las mujeres están más concienciadas de los beneficios de las plantas medicinales en la salud” y las preferimos antes que recurrir a los medicamentos cuando tenemos trastornos como el insomnio –mejor echar mano de la valeriana o la pasiflora-, el sobrepeso y el tránsito intestinal, “aunque las mujeres maduras muestran mayor interés por las plantas para el colesterol (con fitoesteroles) y para combatir los problemas asociados a la menopausia”.
Precisamente la soja y en concreto sus isoflavonas, es la planta medicinal “más indicada para tratar y prevenir los trastornos asociados a la menopausia, como los sofocos y los cambios de humor, siempre que se tome en forma de preparados farmacéuticos estandarizados”, según explica la profesora Concha Navarro, presidenta del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO) y miembro de la junta directiva de la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia (AEEM).
Y un meta-análisis del Instituto Nacional de Salud y Nutrición en Tokio (Japón) publicado en Menopause asegura la ingesta de preparados farmacéuticos de isoflavonas de soja reduce la frecuencia y severidad de los sofocos, que afectan a 8 de cada 10 mujeres.
¿Cuál es tu remedio casero infalible a base de plantas?