Me propusieron vivir una experiencia de coaching personal en el selecto club de fitness, estética y bienestar Caroli. Más o menos conocía la teoría porque había escrito un reportaje sobre el tema en la revista Woman el año pasado y aquí en Belleza Pura también hemos dado información al respecto. Pero la práctica siempre completa la teoria. Fueron 5 sesiones, falte sólo a una y creo que en realidad debería seguir, pero cuando me enteré del precio real 125 eurazos por una hora, pensé que sería mejor dejarlo para otro momento más bollante. De hecho el otoño pasado tuve que cambiar de personal trainer por estrictos motivos económicos, qué os voy a contar que no sepáis…
¡Claro que me hace falta un entrenador físico y también otro mental! Y una masajista, una manicurista a domicilio, y mi tinte mensual, y un fisioterapeuta, y unas clases de risoterapia y otras de cosquilloterapia también. Pero hay que amoldarse a los tiempos que vivimos.
Si te has caído en la cuneta o te han empujado, hay alguien que te puede ayudar a levantarte y seguir por el camino que tienes delante. Charlot sería un buen compañero de camino, aunque siempre es mejor buscar ayuda en un profesional, un coach personal.
Bueno, voy a contaros mi experiencia de coaching personal que en realidad está dirigida a mejorar cualquier área de tu vida, tu relación de pareja o tu vida laboral si no estás en parp. Mi guía en esta aventura fue Juan Martínez Edesa, mi entrenador (coach), con él descubrí cosas sorprendentes sobre mí. La primera fue cómo mi plato favorito: el codidito madrileño puede transcender y transformarse en un potaje maravilloso que refleja mi forma de ser, estar y actuar . Sólo hace falta dirigir la sesión con las preguntas adecuadas para darse cuenta. Y lo hicimos. No sabía que un cocido podía dar para tanto. Claro está que nunca le había dado tantas vueltas.
Al final es igual un cocido que un tango o una playa cubana, cualquier sueño encierra un código encriptado que se transforma en tu ADN emocional. Se exige sinceridad en las respuestas para llegar a crecer en la dirección que tu misma deseas pero que hace tiempo ni te preguntabas. Son 60 minutos de entrevista hacia lo más profundo de tu memoria.
¿Qué quieres en tu vida? La Rueda de la Vida responde como punto de partida para una reflexión inicial. Hay que pararse a pensar y dibujar la rueda real que es tu vida en estos momentos, observando las carencias y los excesos en diferentes esferas: Amor, desarrollo personal, trabajo, relaciones personales, ocio, dinero, entorno físico y salud. Si no te sale redonda, andarás a trompicones.
Viaja al futuro y piensa cómo te gustaría ser o estar dentro de 20 años y empieza a construir sueños en el aire, pero sin pasarse se trata de tu realidad futura. Y así, dibujando objetivos y creando historias sobre tu propia vida presente, pasada y futura te vas encontrando como un espectador de ti mismo, mientras tu coach te va guiando por caminos inexplorados que en realidad no conducen a ninguna parte o tal vez sí. Tienes que confiar en tu coach y dejarte llevar hacia los objetivos que tu mismo te has propuesto. Todo depende de hasta dónde quieras llegar. Cada uno escribe su propio camino.
Hay momentos en que el coach parece que te conoce más que tu misma y te puede instigar con frases que van a tocar justos los resortes que hace falta ajustar. y eso, a veces duele, porque te coloca directamente frente a tus problemas. Si quieres cambiar, tienes que modificar hábitos, gestionar el tiempo, combatir tus demonios, pero sobre todo reforzar tus grandes cualidades. Un coach es una ayuda extra que te prepara para vivir la vida con más fuerza y plenitud. A través de verbalizar lo que necesitas, tus deseos olvidados, tus pasiones ocultas…el coaching personal despierta emociones puras; esas que permanecen escondidas entre el ruido del despertador, el colorete y las galletas del desayuno. Son esas emociones que nos hacen temblar el rictus o fruncir el entrecejo sin ni siquiera saber porqué. ¡Actitud, señoras y señores!
https://www.youtube.com/watch?v=L7tzU-WsE5s
Estamos hablando de abonar tu mente, liberarte de cualquier lastre o trauma, o simplemente redirigir tu vida o seguir el rumbo ya marcado, viento en popa y a toda vela, siguiendo el curso de la dirección actual y progresando adecuadamente hacia tus objetivos. Si quieres llegar, pues llega lo antes posible con la ayuda de tu coach mental. Lanzarte a correr una maratón está bien, pero también hay que sentarse a reflexionar donde estamos realmente y hacia donde queremos ir. La meta sólo la puedes poner tú.
Te ayudará seguro. Pon un coach en tu vida o practica el autocoaching y la meditación, se te notará en la cara, el cuerpo y por supuesto en la mente.
Elige tus sueños, selecciona tus héroes y descubre quién eres y qué hay dentro de tu cabeza. Ya sabes, piensa en poco tí.
Caroli Health Club Hotel Wellington
C/Velázquez, 8
Tel: 91 000 18 86
Madrid.