Odia que le pregunten por su familia, aunque fue su abuelo Robert Ricci (creador de L´Air du Temps) el que le transmitió el gusto y la vocación por los perfumes. Fue a los 20 años, 98-99, cuando decide dedicarse al perfume.De su famosa abuela Nina Ricci prefiere no hablar, le duele hablar de temas familiares. Es clásico y rebelde al mismo tiempo. Se cuestiona todo menos una cosa: el caldo aromático tiene que ser llevable y ponible. Es el único compromiso que tiene con su público. El resto sale todo de debajo de su sombrero. Un sombrero que no se quita desde los 15 años. Hablo en sentido figurado,me asegura que se lo quita para dormir y para hacer en el amor con su mujer. Aunque realmente podría dejarselo puesto…Cuando se lo digo se parte de risa y se agita en la butaca del piso superior de la Galería Caylus donde estamos. Incluso se levanta el sombrero y se puede ver que su melena no está interrumpida por una calva oculta bajo su moderno borsalino. Lleva el sombrero con elegancia y una clase innata. En realidad no hace falta preguntarle por su familia porque hay cosas que se heredan y otras que se intentan desaprender, aunque formen parte de tus cimientos. para crear una historia propia y personal como hace Romano Ricci con cada nueva entrega de sus perfumes. Sin renunciar a lo mejor de la tradición.
Le gusta la velocidad y sobre todo, la sorpresa constante de poder abrir nuevos caminos, embarcarse en aventuras emocionales y olfativas con el menor marketing posible. Antes de ser perfumista, ejerció como piloto de carreras, todavía le gusta conducir coches, también dejarse lleva por el viento: practica vela y vuelos en globo Montgoldfier. Se confiesa un apasionado de la técnica de todas estas disciplinas con vehículo de por medio. Su firma lleva adherido el sencillo mecanismo de una pistola que dispara gran variedad de rosas, preciosos efluvios de madera; su favorito: el patchulí, y su especialidad: notas animales de calidad con un acento sexy y un uso peculiar del almizcle.
Romano es muy divertido y tiene mil historias que contar. El ingrediente principal de sus perfumes es precisamente la historia. Su curiosidad no tiene límites, me pregunta, le contesto y la entrevista casi se transforma en una conversación en la que Filippo, traductor y distribuidor de sus perfumes en Bo Monde, anima a la cercanía. Al final me acompañan a la puerta, hablamos y fumamos un cigarrillo juntos. Me ha dicho que su próximo perfume se insparará en mí y se llamará Mad Madamme. Soy su musa, no puedo creerlo. Es un seductor, como todo buen nariz y he conocido a muchos: Jacques Polge de Chanel me llegó a decir que sabía yo más de perfumes que él (!). En fin, no me extraña que nos conquisten a todas con sus creaciones, la seducción empieza en el creador de fragancias. Para él, los tres mejores del panorama actual son Francis Kurkdjian, Christine Nigel y el top, nuestro Alberto Morillas.
Enchufo la grabadora desde el móvil y se apasiona por la mecánica de la aplicación.
¿Cual es la preguntas más tonta que le han hecho?
Con las que más sufro es con las de Nina Ricci, aunque las contesto con gusto, pero las padezco de alguna manera.
Su marca es suya y la ha hecho él mismo. No ha querido seguir el lado familiar para nada, me cuenta.
Habláme de tu abuela, entonces. (risas) ¿ Algo que te haya dicho tu abuela o cualquier otro miembro de tu familia que te haya sentado mal pero qué haya sido un buen consejo para tí?
Sobre todo mi padre que no tiene nada que ver con la perfumería. Me han educado en que el dinero no da la felicidad. Una educación muy humana, sin ostentación y dudar de todo, poner en cuestión todo.
Así soy ahora siempre pongo en duda el status quo, las reglas.
¿Eres un rebelde?
No, del todo. Sigo muy arraigado a las tradiciones y me gusta destacar la personalidad. De un lado busco caminos nuevos pero llevo un sombrero tradicional. Siempre el mismo. Tengo fotos con 4 años y el mismo sombrero pero de diferente color. Es algo patológico. Ríe con ganas…
Tuvo un período rebelde contra la perfumería, la familia…
Sí, me lancé al deporte automovilístico. No por coraje, le gusta el lado técnico y la sensibilidad para los arreglos mecánicos. Pilotar es también un arte. En un circuito pierdes la noción de la velocidad. Ahora como hobbie sigue pilotando coches de carreras. También hace vela y vuela en globos Montgoldfier.
Momentos decisivos en su vida profesional.
Con 20 años cuando decidí parar mi carrera de piloto profesional, no entrar en el grupo Ricci y aprender sólo en el mundo de la perfumería. Mi preparación duró 6 años. Dejé mis estudios para ser perfumista y crear mi propia marca.
¿Dónde quería ir y dónde ha llegado?
Aportar algo al mundo de la perfumería del que vivo y estoy enamorado. Su objetivo no es hacer dinero, sólo crear algo.
¿Quieres ser original?
En la creación de Juliette, pensó que no quería ser Ricci, que quería algo nuevo, no ser algo más de lo mismo. Siempre intenta buscar algo nuevo, por eso pongo todo en duda sin ser pretencioso.
¿De qué se quiere alejar de la perfumería clásica?
El único punto en común es que todos utilizamos alcohol, pero en el gran consumo es diferente. El ADN de mi marca, el proceso creativo está lleno de libertad. es más arte que business.
No se considera ni nariz, ni perfumista se ve más como un creador global, me explica
¿Cual te parece mi competencia? me pregunta Romano Ricci.
Etat libre de orange. Sí, pero ellos son más bestias todavía que tú, digo yo.
Estoy de acuerdo. Me gustan muchísimo. Si, estamos en la misma onda. Me gustan mucho pero van más allá en la provocación. Pero tiene que estar justificada. Van demasiado lejos.Le gusta experimentar pero con algo real, no hay más límites. Crear con una base real que la gente se pueda encontrar
Muy tradicional, pero las fragancias son de muy buena calidad.
Sus perfumes me parecen modernos por fuera y clásicos por dentro.
Un poco a la antigua pero modernizados. De todas, la más elegante es Citizen Queen o Lady Vengeance, que cambia la rosa de la abuela y le da completamente la vuelta. O Calamity J. un masculino para mujer. Originalidad, pero justificado con un público que lo pueda usar.
¿Romantina dónde lleva el almizcle?
Romantina es el menos original, porque buscaba algo simple, suave y fácil de llevar.
¿Cual es el lujo en una fragancia?
La elección de materias primas de primera calidad. En la composición emplea exquisitas maderas, las más caras.
¿Dónde encuentra esas materias?
Hay muchos fabricantes que me proponen sus aromas. Givadaun, Firmenich… Me gusta el ambroxan, patchuli y el almizcle ambretoline. Hay 30 tipos disponibles en el mercado. El ha seleccionado los 3 principales, amaderados, transparentes, animales. Ha hecho un cóctel de 10 almizcles. el predominante es el ambretoline más de tipo animal.
¿Notas de Miss Charming? Rosa, mandarina, lichi y frutos rojos. Lo hice junto con Francis Kurkdijan.
¿Un perfume masculino que le guste? Terre de Hermés
¿Femenino? Uno de Byredo. No recuerdo el nombre, pero lleva almizcle seguro.
¿De los suyos?
Los míos, los detesto (ríe). Como todo genio se siente mal cuando habla de su obra, piensa como un perfeccionista y se disgusta con el resultado porque trabajaría años sin estar nunca 100% satisfecho. Siempre pienso que le podía haber podido dar más volumen en una nota que en otra. Es una tortura.
Las frutas no le gustan demasiado para sus composiciones, pone una cantidad miníma suponiendo que las incluya. le gustan el patchuli, siempre está en sus creaciones por su punto Chipre que tanto le gusta.
Piensa en alguna mujer o un hombre a la hora de crear un perfume?
No es una mujer creo que en la suma de muchas mujeres. Es un modelo de fantasía.
Sus historias son muy completas…
Al final mi manera de crear, no es crear la fragancia y luego la historia. Siempre empiezo por la historia que es el contenido de base. El primer ingrediente de la personalidad de la fragancia.
Romantina.
La libertad y la búsqueda del amor es la historia de Romantina. Ella ha ido buscando el amor en todos los lados y uno se pregunta si lo encontrará o no.
La idea es el ingrediente. La sensación que tiene es que muchos crean el perfume y luego ponen la idea.
¿Cual es su siguiente idea?
Hay algo de tí que me gusta mucho, tu manera de pensar y poner en cuestión las cosas y en el próximo perfume va a ver mucho de eso, osea que habrá algo de tí. Se llamará Mad Madamme.
Entonces sí, soy yo. Como fin de la entrevista no está mal. Tampoco me perderé el siguiente perfume de Romano Ricci.
Sus perfumes:
Romantina de Juliette has a gun. Precio: 93 €/100 ml. 69 €/50 ml.
Lady Vengeance de Juliette has a gun. Precio: 93 €/100 ml. 69 €/50 ml.
Not a Perfume de Juliette has a gun. Precio: 93 €/100 ml. 69 €/50 ml.
Vengeance Extreme. Precio: 103 €/50 ml.
Miss Charming de Juliette has a gun. Precio: 93 €/100 ml. 69 €/50 ml.
Calamity J. de Juliette has a gun. Precio: 93 €/100 ml. 69 €/50 ml.
Citizen Queen de Juliette has a gun. Precio: 93 €/100 ml. 69 €/50 ml.
Mignight Oud. Precio: 103 €/ 100 ml.