No sé si has estado pero, la verdad es que el Museo Egipcio de Barcelona es único. Se trata de un edificio en pleno Eixample con un fondo dedicado íntegramente al antiguo Egipto formado por más de mil piezas que el coleccionista Jordi Clos ha ido juntando a lo largo del tiempo en esta maravillosa instalación.
Hacen muchas actividades de todo tipo e incluso visitas por la noche, algo no apto para cardíacas ya que si eres un poco aprensiva da un poco de yuyu. A lo que iba. Acaban de inaugurar una exposición temporal que estará hasta el verano, “Moda y Belleza en el antiguo Egipto”. Se trata de un recorrido a lo largo de 3.000 años de historia de la moda en el país del Nilo, así como un homenaje a la estética y al refinado gusto de los antiguos egipcios por el cuidado del cuerpo mediante vestidos, joyas, tatuajes, perfumes y aceites. Creo que debe de haber sido una de las civilizaciones que mayor atención han prestado a cultivar rituales de belleza.
En la museo encontrarás desde unas sandalias para facilitar el viaje hacia el más allá de un difunto, hasta los dos ejemplares de túnicas con pliegues horizontales -de las cuales se conservan una veintena en todo el mundo -, pasando por un variado repertorio de objetos vinculados a la joyería y cosmética de esta sofisticada civilización.
La exposición se divide en tres grandes bloques temáticos:
1. Costumbres y prácticas de la belleza en Egipto antes de las Pirámides.
Desde la prehistoria el ser humano ha dejado testimonios de su inquietud por la moda y la belleza y los egipcios no fueron una excepción, al contrario. Eso ya lo habrás visto tú misma en las imágenes de los jeroglíficos y de los dibujos donde tanto hombres como mujeres se pintaban los ojos y llevaban peinados muy sofisticados. A mi me sorprendieron las denominadas paletas de cosméticos, fabricadas en grauvaca, que se usaban como superficie de preparación de los diferentes productos donde se pulverizaba los productos y luego se mezclaban con algún aglutinante que facilitara su aplicación en los ojos y en otras partes del cuerpo. Agujas de cabello, peines de largas púas y contenedores en piedra para ungüentos y perfumes completan el repertorio de los objetos de tocador de las mujeres egipcias.
2. A la moda durante 3.000 años.
En el país de Cleopatra cuando se enterraba a alguien, las tumbas se llenaban de enseres vinculados al cuidado del cuerpo en lo que hoy conocemos como ajuares funerarios. En el museo puedes admirar el de un niño de dos años que está formado por una cesta de paja atada con cuerdas y lino, dos sandalias de cuero y un pequeño recipiente en terracota negra. El cuerpo del niño está cubierto por una fina tela de lino y se documentan restos de un collar de cuentas. Se ve que el bebé debía de ser de una familia pudiente ya que, la desnudez en Egipto era muy frecuente en las clases bajas. Para que te hagas una idea, en la muestra, se exponen algunas representaciones femeninas desnudas que muestran tatuajes en sus cuerpos como si de pulseras y collares se tratase. Los tatuajes tenían una doble función: estética y como talismanes que proporcionaban una protección mágica.
En cuanto a la belleza estrictamente hablando, uno de los aspectos más sorprendentes de la civilización egipcia es la presencia de pelucas realizadas con pelo natural, así como la representación de una variada y riquísima gama de peinados tanto para hombres como para mujeres. Las pelucas, los postizos y los sofisticados trenzados se consideraban un complemento del vestido, así como un elemento de distinción social. Por lo visto, a causa del calor las personas de clase alta se afeitaban la cabeza y por eso se impuso la moda de las pelucas, más o menos ornamentadas.
La variedad de pelucas y trenzas falsas que han sobrevivido hasta nuestros días reflejan la gran cantidad de estilos de la época. Las pelucas de las mujeres eran menos elaboradas que las usadas por los hombres, y tenían una apariencia más natural. En la exposición podrás ver peines y trenzas de pelo natural.
En cuanto a maquillaje, el kohl es uno de los elementos más conocidos y se conservaba en recipientes de formas y materiales diversos. Los labios también se maquillaban con óxido de hierro que les daba una tonalidad rojiza y también se usaba como colorete para las mejillas. Hay vasijas, casi siempre de alabastro, espátulas, peines, pasadores para el cabello, pinzas para eliminar el vello, potes de alabastro para ungüentos…un montón de utensilios que vienen a demostrar la gran preocupación de los egicios por embellecer sus caras y cuerpos. En el neceser para el maquillaje también figuran las llamadas cucharas de cosméticos y varios espejos.
3. De los azules campos de lino a los colores de la vida eterna.
Que nos muestra la actividad textil y la moda en el Egipto de los faraones.
La exposición está formada por piezas de la colección permanente del Museu Egipci de Barcelona y aportaciones de otros museos europeos. La muestra permanecerá hasta el 20 de julio de 2012 así es que, si no vives en Barcelona, tienes tiempo de hacer una escapada para venir a verla. Además, te lo ponen fácil porque el museo está abierto de lunes a domingo.
Precio entrada adulto: 11 euros.
MUSEU EGIPCI DE BARCELONA
C/ Valencia, 284. Barcelona. Tel. 93 488 01 88.
www.museuegipci.com