Ay, el otoño y sus colores, sus frutos de estación, sus lluvias imprevistas, su bajada de las temperaturas… Versamos y versamos sobre su eterna casuística y nos olvidamos de lo más importante, convendréis conmigo: que está en tierra de nadie en cuanto a los días de asueto. El verano ha sido largo pero ya queda lejos, y aún faltan dos meses para Navidad. Necesitamos, porque lo necesitamos, una “escapadita”, que diría un treintañero.
Preferiblemente a un entorno alejado del nuestro, un poco salvaje, decididamente campestre.
El Balneario Sicilia, en Jaraba, Zaragoza, se muestra como una de esas opciones apetecibles. Rodeado por ochenta mil metros cuadrados de parques y jardines, despliega en otoño una variada propuesta de terapias termales, rutas para conocer el paisaje e incluso un recorrido artístico enmarcado en la naturaleza. Perfecto para un fin de semana o un puentecito español de estos que tanto disfrutamos.
Como sabéis, la terapia de aguas termales es tremendamente eficaz para tratar diversas dolencias, o, sencillamente, relajarnos. El atractivo de las que se practican en el Balneario Sicilia es que además están perfectamente integradas en la naturaleza: el Jardín Termal da a un bancal de lavanda y la piscina está excavada en la roca.
El privilegiado entorno del balneario permite además seguir disfrutando del paisaje después de la jornada de termalismo. Las posibilidades son muchas, pero la tierra y el agua son siempre protagonistas. Estas son algunas de las excursiones de otoño que pueden realizarse alrededor de Jaraba:
–Laguna de Gallocanta, uno de los humedales más importantes de la Península y que en el otoño llega a concentrar hasta 10.000 aves de 200 especies distintas. Merece la pena acercarse al atardecer, que es cuando las aves llegan a la laguna en enormes bandadas y arman un enorme alboroto. Un espectáculo visual y acústico único.
– Monasterio de Piedra: a 15 km del balneario. Se trata de un parque natural con impresionantes cascadas, lagos tranquilos y un Monasterio Cisterciense para descubrir.
–Hoces del Río Mesa, declaradas de interés turístico. Están a 4km del balneario y son un conjunto de desfiladeros de altas paredes rojizas totalmente verticales. En esta zona también se puede visitar el Santuario de la Virgen de Jaraba.
–Reserva de Buitres leonados: una de las buitreras más impresionantes del país, al final de un desfiladero desde el que poder observarlas con tranquilidad.
–Pantano de la Traquera: un lugar perfecto para la realización de todo tipo de actividades acuáticas.
-Hacer escalada en el desfiladero de Calmarza.
Las aguas del Jaraba son las auténticas protagonistas del balneario. Brotan directamente de la tierra desde siete manantiales a una temperatura constante de 34 ºC llenándolo todo de vida, hasta las especies vegetales a las que baña son singulares. Las aguas del Balneario Sicilia han sido declaradas de utilidad pública, están clasificadas como oligometálicas de media mineralización, cálcicas, magnésicas, bicarbonatadas mixtas y ligeramente radiactivas por lo que poseen propiedades calmantes y antirritantes. El agua termal de Jaraba es rica en sulfatos que aportan elasticidad a la piel, también en calcio y magnesio que estimulan la función activadora de actividad enzimática de la piel. Asimismo sus propiedades dermatológicas provienen de su alta composición en sodio y cloruros que contribuyen a regular el exceso de grasa, a controlar el equilibrio hídrico de la piel y calmar la irritación cutánea.
Si te apetece pasar un fin de semana en este Balneario, puedes aprovechar su promoción Programa Termal de otoño. Es un paquete de fin de semana que incluye dos noches y tres días, en los que disfrutar de varios tratamientos:
Primer día: una hora de relax en la Cueva Termal Activa, una cueva natural con una lámina de agua 250 metros cuadrados con salida a cielo abierto que dispone de jacuzzi, cascada cervical, nado contra-corriente…
Segundo día: por la mañana, un masaje Niágara o un masaje manual con esencias y el uso libre del gimnasio y la piscina termal. Por la tarde, se sugiere una visita al cañón del río mesa para disfrutar de los colores del otoño y, a la vuelta, una hora de relax en la cueva termal.
Tercer día: mañana libre para conocer los alrededores del balneario y disfrutar de una de las muchas excursiones que se pueden hacer. También se puede disfrutar del Jardín Termal con un descuento especial o de cualquiera de los tratamientos que el balneario ofrece.
El precio del paquete por persona es 219 euros en media pensión y 239 euros en pensión completa.
Mª José dice:
Ines 
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