¿Ya estás a punto de iniciar vacaciones y dispuest@ a dar envidia a los que ya están acabando?
Aunque los hábitos de los españoles a la hora de elegir la fecha en la que nos vamos de vacaciones han cambiado mucho, agosto siempre ha sido el mes de descanso por excelencia, hubo un tiempo en que casi todo el mundo se iba de vacaciones este mes y generalmente al pueblo. Ahora la cosa está más repartida, tanto en destinos como en fechas.
Muchos cogeréis el coche -mucho cuidado-, otros optaréis por el tren, el autobús o incluso el barco, y los afortunados que cogeréis el avión para hacer un viaje largo y si puede ser cambiar de país y de aires, sabed que en los viajes superiores a 4 horas, existe el riesgo de sufrir el conocido como Síndrome de la Clase Turista. Nunca una enfermedad diferenció tanto entre clases sociales, si tienes dinero y vas en bussines, ¿no tienes riesgo de sufrirla? Pues si no te mueves de tu asiento, aunque tengas más ceros en tu cuentas, tienes el mismo riesgo porque no está solo relacionado con la falta de espacio en el avión, sino también con la ausencia de movimiento. Por eso es bueno conocer cómo evitarlo.
Las personas con problemas circulatorios, con enfermedades hematológicas, embarazadas, o que hayan sufrido trombosis anteriormente, son las más propensas a padecer este síndrome.
Se le puso este nombre por la relación que se estableció entre el problema que padecían los ocupantes de los aviones -que comúnmente eran los que sufrían problemas circulatorios- por el reducido espacio entre los asientos de la clase turista en los aviones.
Os damos unos sencillos consejos para tener un buen viaje y evitar el riesgo de sufrir este síndrome:
- Realiza círculos con el tobillo girando ambos, uno en el sentido de las agujas del reloj y otro en el sentido contrario, con la punta de los pies en el suelo y los talones alzados.
- Realiza flexiones de pies apoyando el talón en el suelo y levantando la punta del piel hacia arriba.
- Con la espalda apoyada sobre el respaldo del asiento, sube una de las piernas a media altura con la rodilla flexionada, mientras se contrae el muslo. Después baja la pierna, relajando el músculo y comienza con la otra pierna.
- Si es posible, pasea cada 1 o 2 horas.
- Bebe pequeñas cantidades de agua con regularidad para evitar la deshidratación.
- Procura viajar con ropa y calzado cómodo y evita prendas ajustadas.
De todas formas, a las personas que se encuentran en el grupo de riesgo, los doctores recomiendan consultar a su especialista antes de emprender un viaje largo, para que les proporcionen consejos adicionales y específicos según su caso.
Los síntomas del Síndrome de la Clase Turista no tienen por qué manifestarse durante el vuelo, pueden aparecer con posterioridad en forma de hinchazón, dolor, o bien hormigueo en las extremidades.
¿Vas a coger el avión estas vacaciones?, ¿dónde te marchas?