Hace poco más de un mes se celebró el Día Mundial contra el Cáncer, y expertos y asociaciones alertaron de la importancia de llamar al cáncer por su nombre como un paso más en su normalización. Y muchos se ha hablado últimamente de lo importante que es el hecho de que personajes públicos hagan público que padecen cáncer de forma natural (como hizo Esperanza Aguirre) porque es un gesto muy beneficioso para los pacientes anónimos que padecen la misma enfermedad.
A esa normalización también contribuye que cada vez más firmas de moda, de cosmética o de complementos creen artículos para las necesidades de aquellas personas que padecen o han padecido cáncer, sin necesidad de que tengan que acudir a tiendas especializadas. Es el caso, por ejemplo, de las firmas de lencería y ropa de baño para mujeres que se han sometido a una mastectomía.
Recuperar la autoestima y perder el pudor a mostrarse en bañador tras una mastectomía no es fácil, pero sí ayuda el hecho de encontrar prendas bonitas, con las que puedan sentirse cómodas y atractivas. Pensando en estas necesidades, la firma de ropa de baño Red Point ha incluido en su colección para el verano 2011, una línea post mastectomía que garantiza comodidad y diseño.
Red Point decidió crear esta línea al ver que muchas clientas se quejaban de que las firmas que ofrecen bañadores para utilizar con prótesis no suelen apostar mucho por diseños atractivos y bonitos.
Por eso han diseñado unas prendas que, aparentemente no se diferencian de un bikini o bañador normal, pero que están confeccionadas aplicando los más exhaustivos controles técnicos para garantizar no sólo la comodidad de las mujeres que los usan sino también su tranquilidad.
Interiormente son prendas bastante complejas: se han utilizado para su confección forros especiales extra resistentes y un sistema de gomas y sujeciones específicos que garantizan una adaptación natural de las prótesis al cuerpo sin posibilidad de desplazamiento.
Exteriormente, el único cambio es una ligera concesión en el escote y axila, que son más cerrados para proteger del sol y para que los volúmenes del pecho sean naturales.
Han creado tres modelos de bikini y cinco de bañadores. Ya sólo falta que estas iniciativas se extiendan cada vez a más firmas.
Precio: 75 euros.