Con estas elevadas temperaturas, cuando el calor se vuelve insoportable, las pieles sufren deshidratación. En efecto, el calor aprieta y el rostro pierde su equilibrio natural. Sentimos tirantez en la cara y falta de confort.
Si te encuentras lejos de la piscina o de la playa y no quieres sucumbir ante el sol, te vamos a proponer un remedio, que será muy fácil tener a mano.
Uno de los productos imprescindibles de belleza es el agua termal. Aporta un extra de hidratación y es perfecta para llevarla en el bolso. Su vaporizador hace que sea muy sencilla su aplicación, como por ejemplo si nos encontramos en ambientes secos, como un vuelo excesivamente largo.
Skeyndor te refresca con Aquaterm, un concentrado de agua termal, que crea una agradable sensación de frescor y suavidad. La piel del rostro recupera su hidratación y se tonifica. Los usos pueden ser múltiples. En cualquier situación en la que tu piel se resienta, Aquaterm te puede salvar de la urgencia.
La piel queda fresquita al instante al desplegarse una película protectora. También sirve para fijar el maquillaje o para relajar los ojos tras un intenso día de trabajo.
Skeyndor Aquaterm, pulverizador de agua termal, que refresca la piel deshidratada.
Precio: 11 euros.