Cada vez es más corriente ver a personas que padecen esta enfermedad de la piel. El vitíligo es una despigmentación en la piel provocada por falta de melanina. Se manifiesta con manchas blancas, limitadas, de diferentes tamaños o formas y que generalmente aparecen en zonas como párpados, nuca, tronco, genitales y articulaciones, aunque esto no exime a otras partes de padecerlo.
Algunos expertos tratan el vitíligo más como un síntoma que como una enfermedad, entre otras cosas porque se desconoce cual es su verdadero origen. Lo que sí está probado es que la piel puede actuar como receptor (espejo) de síntomas emocionales del paciente, como angustia, estrés y los refleje en su cara o en sus manos con dichas manchas. También está comprobado que a pesar de no ser hereditario, el tener un progenitor o familiar directo que lo padezca hace al paciente estar más predispuesto a esta manifestación.
El vitíligo no tiene nada que ver con el cáncer de piel, la psoriasis, los hongos o el albinismo como en algunas ocasiones se ha llegado a decir.
Algunos personajes públicos que tiene vitíligo son Juan y Medio o Michael Jackson.
La evolución de las manchas es imprevisible, incluso algunas de ellas pueden repigmentarse solas sin explicación aparente.
El mejor consejo que se puede dar a los lectores que lo padezcan es actuar con plena normalidad y aceptar las manchas, estar conforme con ellas es el mejor tratamiento que hay, y lo digo después de haber probado unos pocos.
No se debe abusar de una exposición prolongada al sol, pero con una buena protección los rayos UVA son incluso recomendables.
Muchos son los tratamientos que cada cierto tiempo se presentan como cura del vitíligo, pero lo cierto es que en realidad no tiene cura, al menos hasta la fecha. Se ha demostrado que muchos tratamientos tienen daños colaterales mucho más graves que las propias manchas que no son más que un problema estético en el fondo.